A finales del año pasado compré en la tienda de NiceHCK este par de auriculares in-ear, los Toneking TK12s:
Llevaba tiempo detrás de estos Toneking TK12s porque a veces suelo ir un poco a contracorriente a la hora de probar cosas nuevas. Leí algunas reviews y en ella se destacaba una cosa por encima de otras, su sonido masivo. Ante tales palabras a uno siempre le queda la duda ¿Qué hay de cierto en dichas reviews? Así que cuando llegó el 11/11 busqué la opción con conectores MMCX y los compré para comprobarlo yo mismo ¿Quieres saber más acerca del sonido masivo? Pasen y lean.
Especificaciones del Toneking TK12s
- Drivers: 1 Driver dinámico y 2 Balanced Armature
- Impedancia: 18 Ω
- Rango de frecuencia: 10-35000Hz
- Sensibilidad: 120±3dB/mW
- Conexión MMCX
Embalaje y accesorios
Cuando abrí el paquete ya conocía que el embalaje iba a ser lo peor del conjunto. Al menos me esperaba un bonito estuche con la marca Toneking como que el que vino con los Mrz Tomahawk. Pero no fue así, sino peor, porque vino con un típico estuche redondo, menos tips de las que se muestran en la foto y no venían las aletas. El cable sí es el de la fotografía pero sin ganchos de memoria.
Cabe destacar que existen miles de auriculares in ear de menor precio con infinita mejor experiencia unboxing que éstos, pero no por ello van a sonar mejor.
El cable del Toneking TK12s no está mal, pero no lo encuentro adecuado para el precio ya que últimamente se está cuidando mejor este aspecto y se está potenciando acompañar a los IEM’s con un cable, o incluso dos, que estén a la par cualitativamente hablando. Además, para mi gusto, carecer de los ganchos metálicos que permiten dar forma para su colocación sobre oreja es un punto negativo porque, al contrario que otras personas, me resultan muy cómodos. Otro punto negativo del cable es el conector Jack porque carece de relieve, es totalmente liso y eso dificulta sobre todo la extracción del mismo.
Diseño, construcción y ergonomía
Tienen prácticamente un diseño balístico y eso se nota tanto en peso como en su acabado metálico, sin fisuras, totalmente lisos y con solo una junta visible. En parte superior trasera se halla un pequeño orificio. El canal mide 5.5 mm y está bien sellado mediante una rejilla sin atisbo de irregularidades que supongan algún desprendimiento fortuito. Las cápsulas son un poco largas comparadas con el resto de IEM’s que dispongo, ello dificulta el acomode sobre oreja, invitando a crear una forma adecuada con los ganchos de metal que permitan un ajuste seguro.
Estos misiles sónicos se insertan más profundamente de lo normal en mis canales auditivos. Normalmente suelo usar olivas de silicona de tamaño grande, pero en este caso las uso de tamaño mediano para aprovechar la citada particularidad.
Pueden ser usados de la manera tradicional o sobre oreja teniendo en cuenta lo ya expuesto. Los conectores MMCX son de calidad y el ajuste es óptimo y firme. En cuanto al aislamiento pese a tener una inserción más profunda no es notable, sino bueno.
Sonido del Toneking TK12s e impresiones particulares
La respuesta de frecuencia que acompaña al producto en su web de compra muestra una curva bastante plana con un pequeño énfasis entre 2 y 4 KHz para comenzar un descenso suave hasta los 35KHz. A mi juicio dicha curva no refleja la realidad. En mi opinión los Toneking TK12s destacan claramente por su perfil en L donde la zona baja es la protagonista principal, pero en este cuento no solo actúan los graves. Aunque ellos son los verdaderos artífices de producir esa sensación de sonido masivo.
Graves
El grave es sumamente profundo y tiene una fuerza tremenda, el subgrave se nota a la par y se distingue bien laminado donde cada frecuencia se reproduce con exactitud proporcionando gran detalle. Lejos de lo que pueda parecer los bajos no son largos e inacabables, sino que tienen gran impacto pero bastante buen control aunque no excelente. El grave es rico en matices, suena natural, sin edulcorar, no es un bajo de discoteca sobre enfatizado de zona media, es un grave y subgrave de monitor de estudio pero muy poderoso y atractivo. Dicho poder tiene dos caras: la cara buena permite disfrutar de la música a volumen bajo porque aun así dicho rango se muestra completo. La cara mala es que el sonido masivo que genera tiende a fatigar, el tiempo que los aguantemos dependerá de nuestra tolerancia al subgrave, del volumen de escucha y de la música que oigamos, porque huelga
decir que los graves no se los inventa, sino que aparecerán cuando tocan. Llegados a este punto uno puede pensar que el grave inundará el sonido de forma horizontal invadiendo los medios pero no es así, en ningún modo. Otra gran virtud de estos IEM’s es la gran separación de las frecuencias y la gran cohesión de los tres drivers. Las transiciones no se notan “dobladas” y el detalle se mantiene en esas zonas sin provocar sobresaltos ni picos.
Medios
Sonido en L, los medios están uno o dos peldaños por debajo en presencia. Carecen de la espectacularidad y el impacto de los bajos manteniéndose bastante planos y naturales. Se podría decir que tienen un punto de oscuridad aunque no por ello se muestran velados, al contrario, ofrecen un buen nivel de detalle y profundidad. No son unos medios vivos ni brillantes ni emocionantes pero las voces gozan de una textura cálida y analógica. ¿Sibilancias? Absolutamente cero.
Agudos
Cualquiera que sepa que este IEM tiene tres drivers pensará que alguno de ellos estará dedicado a los agudos. Cualquiera que oiga este IEM puede llegar a pensar que ese driver no suena y puede que incluso busque alguna web que genere tonos puros y se ponga a reproducirlos para ver hasta dónde llegan. Pues bien, yo lo he hecho, desde los 6KHz hasta los 16KHz, y suenan. Otro que no los haya escuchado se preguntará el porqué de semejante introducción. En resumen, el agudo suena pero no brilla, no chirría, no corta, no perfora…suena. Simplemente se ejecuta de una manera plana y escrupulosa. Aportan el detalle necesario a los medios y cumplen su papel, supuestamente, hasta los 35Khz. Los agudos están realmente limados pero no diría que recortados, ya que el recorte implicaría cero y no es así. Pero uno no puede dejar de preguntarse al escuchar este IEM ¿qué pasa con los
agudos? Pues solo que no tienen la presencia que en otros IEMs sino que se mantienen al nivel de los medios, planos.
¿Cómo definir el sonido de esos IEMs en conjunto? Masivo, enorme, espectacular, con un toque de oscuridad. La música se siente como en un cine de última generación. La escena es esférica, el impacto es tremendo, la separación es grande, al igual que el detalle pese a la falta de brillo. Es un IEM con una marcada sonoridad propia y particular capaz de polarizar las opiniones sobre él, que nunca provocará indiferencia.
Artículo escrito para auricular.org por “cqtek”